ROCHESTER — Cuando Heather Fiore preguntó a quién le gustaban las bayas más de entre el trío de frutas y vegetales que los estudiantes de cuarto grado en la clase de Linda Lynch degustaron (probaron), muchos de los estudiantes alzaron las manos.
A unos pocos les gustaban los pimientos. A otros les gustó la lechuga roja, y la mayoría alzó las manos cuando se les preguntó si les había gustado el apio que degustaron la semana anterior.
La degustación es el primer paso en el nuevo currículo Art4Eating que Young Audiences of Rochester (YA, siglas en inglés) creó para enseñar nutrición y ayudar a los estudiantes jóvenes y sus familias a desarrollar hábitos alimenticios sanos, explicó Annette Ramos, administradora de los servicios educativos de YA.
El aspecto de arte surge cuando días más tarde, Michelle Cardulla, que es una artista así como editora de la revista Lake Effect, ayuda a los niños a dibujar y pintar los diferentes alimentos que ellos están degustando.
"Es realmente algo impresionante ver lo que ellos crean", dijo Lynch.
Las clases de tercer y cuarto grado participaron en el proyecto piloto ofrecido la primavera pasada, dijo Ramos. El programa continuará en la Escuela 46 con algunas revisiones ofrecidas por los maestros en el otoño, observó. YA espera también que eventualmente el programa se ofrezca en más escuelas, dijo.
"Damos por sentado (ciertas) clases de cosas, como por ejemplo niños que nunca han ido a un huerto o sembrado algo", dijo Cardulla. "El concepto de que las cosas crecen en la tierra es abstracto para ellos. De esto es lo que se trata este programa. Esperamos que ellos siembren algo y cultiven sus propias cosas y obtengan el regocijo de eso así como de cocinar".
El programa de integración de arte tiene por objetivo educar a los estudiantes acerca de la ciencia del cultivo de frutas y vegetales, dijo Ramos, cuando plantan las semillas y las comen y aprenden acerca de fotosíntesis. Y ellos aprendieron acerca de los agentes químicos en los otros alimentos que comen, cuando Fiore repasó la etiqueta de los alimentos con la clase de Lynch durante la sesión del 20 de mayo. Fiore es coordinadora del proyecto de salud del Centro Médico de la Universidad de Rochester.
"Ellos tienen un gráfico que llevan a casa para dar seguimiento a los colores (de los alimentos) que comen", añadió Lynch. "La misión es comer tantos colores como ellos puedan. … Están tratando de comer un arcoíris".
Fiore explicó a los estudiantes que más colores en una comida significan más nutrición. Por eso, la lechuga de hojas rojas tiene más nutrientes comparada con el apio, dijo.
Y les pidió a los estudiantes que pensaran acerca de lo que pasa cuando ellos hacen una ensalada verde con apio y aderezo tipo ranch.
"Ustedes piensan que están comiendo sano pero no están obteniendo mucha nutrición", dijo Fiore. "Pero traten de mezclarla con lechuga roja… y es más nutritiva".
Shauntonique Chatman, 11, dijo que le gusta degustar diferentes frutas y vegetales. "Es bueno degustar todo para saber cómo (las cosas) saben y lo bueno que es", dijo.
Jayla Araujo, 10, dijo que no le gustaba la lechuga antes de degustarla en la clase. Ella dijo también que el proyecto ayuda a los estudiantes.
"De modo que cuando uno crezca sea más saludable y fuerte", dijo.
Una semana más tarde el 29 de mayo, cuando los estudiantes de tercer grado de Cari Mezzoprete entraron al salón de clases estaban tan emocionados acerca de lo que iban a pintar como lo estaban acerca de los alimentos que ellos habían degustado.
"Oh flores", ellos dijeron casi al unísono.
Cardulla dijo que los estudiantes pintarían un cuadro de "naturaleza muerta" de cualquier parte de un centro de mesa que había colocado en cada cuadrante de los escritorios – tulipanes y pensamientos rosados y púrpuras en pequeños floreros de cristal y la coliflor y bok choy (repollo chino) que rodeaban las flores.
Los estudiantes habían degustado bok choy a principios de la semana, además de espinaca y acelga, dijo Mezzoprete.
"Lo que realmente me gusta del programa es que ellos son expuestos a diferentes vegetales a los que no habían sido expuestos antes" añadió.
Cardulla dijo que las flores que estaban usando se podían comer, lo cual produjo una reacción "ewww" de los estudiantes" ella añadió.
Los estudiantes tuvieron dificultad para resistir la tentación de tocar los objetos cuando Cardulla les aconsejaba que estudiaran los colores en el centro de mesa antes de dibujarlos y pintarlos.
"Ustedes saben que leemos de cerca y nos fijamos en los detalles, y eso es lo que estamos haciendo ahora", observó Mezzoprete. "Creo que lo pueden hacer".
Cardulla reconoció que la tarea era un reto ya que algunos estudiantes luchaban con la dimensión y el color.
"Pintar no es fácil, pero es divertido", dijo.
Mehmetali Tamcan, 9, llenó todo su papel blanco con el tulipán en el florero con agua. Escogió el tulipán porque es "realmente bonito", dijo.
"Cuando era pequeña comía todo", dijo. "Desde entonces, no me gustan tanto (los vegetales)".
Nedi Santiago también pintó el tulipán por su belleza. Dijo que le gustaba probar cosas nuevas, tales como diferentes frutas y vegetales así como pintar el bok choy, que ella degustó por primera vez.
"Le da mucha energía a uno", dijo Nedi.