En enero de 2019, miles de adolescentes y adultos jóvenes irán a Panamá para la Jornada Mundial de la Juventud. A medida que los jóvenes comienzan a prepararse para esta celebración internacional de la fe, la virgen María puede ser una compañera en este viaje.
“María no es la clase de personas que para estar bien necesita un buen sofá donde sentirse cómoda y segura”, escribió el Papa Francisco en un mensaje a los jóvenes en 2017. Después de decir “sí” a convertirse en la madre del salvador, añadió, María no se dejó paralizar por el miedo o el orgullo sino que salió a ayudar a su prima Isabel. “¡Ella no es una joven-sofá. Si su prima anciana necesita una mano, ella no se demora y se pone inmediatamente en camino”.
Esta decisividad resuena en el tema de la Jornada Mundial de la Juventud 2019: “He aquí la sierva del Señor, hágase en mí según tu palabra”, la respuesta que María dio al ángel Gabriel en la Anunciación. En julio pasado, la respuesta de María, también llamada su “fiat”, se convirtió en la base de una vivaz canción de Abdiel Jiménez, catequista de la parroquia Cristo Resucitado en Panamá.
“Mi madre es una mujer luchadora, una mujer trabajadora y así es como veo a María”, dijo Jiménez sobre su inspiración al escribir las letras del himno oficial de la Jornada Mundial de la Juventud de Panamá. En un video, agregó que quería centrarse en el “sí” de Nuestra Señora, la evangelización y la alegría cristiana que puede dejar una marca en los demás.
María le dio su sí a Dios con libertad y sinceridad. Ella no dijo “no, gracias”; o diluyó su respuesta diciendo que cumpliría las palabras de Dios “siempre y cuando no le pidiera demasiado”; o pidió que el momento fuera más oportuno (hasta que José y ella estuvieran casados). Dios es quien inicia la relación con María pero él espera la respuesta de María.
La virgen María no deja de impresionarme porque con su desinteresada y abnegada respuesta, ella dijo que sí a todo lo que Dios quiere.
“Tan pronto como la voluntad de Dios se vuelve clara, ella la acepta completamente”, dijo el padre John Henry Hanson. Ella cumple esa decisión en todo momento.
Imagine todos los “síes” que siguieron. Sí a ser la madre del salvador, sí a dar a luz en un pesebre, sí a huir a Egipto, sí a que Jesús se perdiera en el Templo cuando era niño, sí a ver a su hijo perseguido, sí a Jesús entregando su vida, sí a convertirse en la madre de todos al pie de la cruz. Pero, incluso cuando el decir que sí a la voluntad de Dios no fue fácil, su respuesta fue resultado del amor de Dios.
Durante la Jornada Mundial de la Juventud en Polonia, el Papa Francisco les dijo a los jóvenes que eviten la “felicidad-sofá”, lo cual trae una falsa sensación de seguridad porque no hay riesgos, ni esfuerzos, ni dolor. Ser “jóvenes-sofá” puede hacer que los jóvenes se sientan cómodamente aletargados y alejados de la llamada de Dios.
Recordar el “fiat” que cambió la vida de María (y a todo el mundo) mientras nos preparamos para la próxima Jornada Mundial de la Juventud puede darnos el coraje para decir humildemente “sí” a Dios y responder con todo nuestro ser, y estar abiertos a las obras del Espíritu Santo todos los días de nuestras vidas.
“Cuando Dios toca el corazón de un joven o de una joven, se vuelven capaces de grandes obras”, escribió el Papa. “Las ‘cosas grandes’ que el Todopoderoso ha hecho en la vida de María nos hablan también del viaje de nuestra vida, que no es un deambular sin sentido, sino una peregrinación que, aun con todas sus incertidumbres y sufrimientos, encuentra en Dios su plenitud”.
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Negro Chin es editor asociado bilingüe de la Revista Maryknoll.