ROCHESTER — Estudiantes de medicina en la Escuela de Medicina y Odontología de la Universidad de Rochester comenzaron una clínica gratis, fuera de horas laborables para residentes del área hace varios años y recientemente ampliaron sus servicios a la comunidad latina.
Los estudiantes tratan a pacientes cuyos seguros no son suficiente o que no tienen seguro y presentan condiciones agudas como también ayudan a otros a manejar sus condiciones crónicas durante clínicas semanales en el St. Joseph’s Neighborhood Center (Centro del Vecindario San José) y la Iglesia Metodista Asbury, explicó Ted Ryser, uno de los cofundadores de la clínica.
A principios de este verano los miembros de la Asociación Médica de Estudiantes Latinos, (siglas en ingles LMSA), decidieron allegarse a los hispanoparlantes de la comunidad teniendo una "Noche de Español" una vez al mes en Asbury, dijo Eric Nielsen, un estudiante del segundo año de Durham, Connecticut.
La iniciativa conecta también con el Latino Health Pathway (Camino de Salud Latina) que se enseña en la escuela de medicina. El programa matricula estudiantes de medicina interesados en desarrollar sus destrezas escritas y habladas en español médico y estimula su conocimiento de la cultura latina y las necesidades de la atención de salud específicas de la población diversa localmente, según www.urmc.rochester.edu/education/md/prospective-students/elective-pathways/latino-health-pathway.cfm.
"También es importante para nosotros estar expuestos" a pacientes latinos en Rochester como parte del programa, dijo Ryser, un estudiante del tercer año de Salt Lake City, Utah.
La "Noche de Español" ofrece este tipo de experiencia práctica en la clínica de las oficinas en el sótano de la iglesia Asbury que se ha convertido en salas para examinar para el uso de los estudiantes, dijo Ryser. Esta clínica ha servido aproximadamente a 2,000 personas desde que abrió hace cinco años, de acuerdo a las directoras Rebecca Levinn and Jenny Horowitz, y ha satisfecho las necesidades de los pacientes que de no ser así habrían ido a la sala de emergencia o no habrían recibido servicios.
Pero pocos pacientes latinos han sido tratados en Asbury, dijeron Nielsen y Ryser. De hecho, durante las tres clínicas de verano ofrecidas allí en español, hubo más voluntarios que pacientes, observó Ryser.
"La transportación es un reto", dijo Ryser. "Y ha sido difícil llevar el mensaje sobre el servicio a las personas que necesitan ayuda".
Nielsen dijo que ha tratado de eliminar estas barreras proveyendo pases de autobuses para los residentes a los directores de los apartamentos St. Michael’s y Los Flamboyanes, indicando que los directores también han dejado saber a los residentes sobre la clínica. Pero el grupo que se beneficiaría más de los servicios de la clínica en español — los latinos de edad avanzada — no parece sentirse cómodo usando transportación pública.
No hemos visto pacientes de estos apartamentos, dijo.
Los estudiantes han tratado de hacer arreglos de transportación con la universidad como también con iglesias y otras organizaciones de la comunidad, pero el obstáculo más grande ha sido seguro de responsabilidad, dijo él.
Albert Algarín, que está a cargo del Centro de la Comunidad Hispana en Los Flamboyanes para servir a las personas latinas de edad avanzada allí, dijo que él continuará trabajando con los estudiantes para encontrar una manera para conectarles con los residentes. Dijo que la atención de salud que ellos están proveyendo es un gran recurso para los residentes.
"Les dije (a los estudiantes) que el problema que iban a tener es que ellos lleguen donde ustedes", dijo Algarín. "Pero de alguna manera debemos encontrar un puente donde podamos superar esto (obstáculo) de manera que el servicio pueda continuar".
Los estudiantes dijeron que ellos no se sienten desanimados en intento de ayudar a tratar las necesidades de atención de salud de la comunidad latina, que es también parte de la declaración de propósitos de LMSA. La asociación fue también parte de una feria de salud en Los Flamboyanes y tuvo un kiosco en el Festival Puertorriqueño, dijo Nielsen. Además de informar a la gente sobre la clínica, los estudiantes también quieren estimular a los latinos a considerar carreras en la salud.
Para Andrés Sánchez, un estudiante del segundo año oriundo de Colombia, la misión de ayudar a latinos es personal. Cuando su familia vivía en Miami, su mamá recibió servicios de un tipo de clínica similar que fue operada por estudiantes de la Universidad de Miami.
Como inmigrantes, pasamos por tiempos bastante difíciles, dijo Sánchez. Y mi mamá, ella usó un servicio como éste… así que sé el valor de esto".
NOTA DE EDITOR: La clínica médica gratis "Noche de Español" está disponible de la 6 a 8 p.m. cada tercer jueves en la Primera Iglesia Metodista Asbury, 1050 Avenida East 1050, Rochester. Para más información sobre las clínicas gratis en Asbury y el Centro del Vecindario San José, envíe un e-mail a Urwell_clinicdirectors@urmc.rochester.edu o llame al 585-271-1050, ext. 126.