ROCHESTER — Los líderes de las iglesias protestantes y católicas están de acuerdo en que algo debe hacerse para lidiar con las crecientes tasas de aborto entre las mujeres hispanas y afroamericanas en Rochester.
Para dirigir tal efecto, un grupo de ministros lanzó la campaña "¿No soy un niño? Para pedir a la gente "de buena conciencia" que se junte para crear conciencia de esta tragedia en curso, dijo el Rev. John Walker, pastor principal de la Iglesia Faith Christian.
Como parte del aumento de esa conciencia, la campaña también creó una página web, aminotachild.com, que provee información acerca de las tendencias de 10 años en las comunidades étnicas del Condado de Monroe. La tasa de aborto para las hispanas aumentó de 15 por ciento a 25 por ciento del 2000 al 2010, comparado con un aumento de 8 por ciento entre las afroamericanas y una reducción de 13 por ciento entre las mujeres blancas. Durante esa década, el número de abortos entre las hispanas por 1,000 nacimientos vivos también se duplicó de 180 a 339.
"Esto no es una cosa solamente protestante o católica, ni siquiera es solamente de los cristianos", dijo el Rev. Walker. "Piénselo. Nos estamos matando a nosotros mismos. Por eso, esto es algo donde podemos unirnos, donde la gente de buena conciencia puede juntarse y decir, ‘Mire, esto es un niño’. Es paradójico porque de un lado decimos que queremos proteger a los niños, pero solamente después de que salen del vientre".
La primera inquietud de la campaña es lidiar con las tasas altas de aborto entre las latinas y afroamericanas en la ciudad donde 36 por ciento de los embarazos afroamericanos terminan en aborto y la tasa de abortos latinos ha incrementado 67 por ciento, explicó el Rev. Walker.
Si esto se parea con el hecho de que 90 por ciento de los embarazos en la ciudad son el resultado de relaciones fuera del matrimonio, no es de extrañar que la comunidad tenga esta crisis, comentó él.
Muchos niños se están criando sin padres y sin tener un modelo que les enseñe un sentido de responsabilidad o cómo tener relaciones sanas, dijo el Rev. Walker.
Y muchos en la comunidad latina no hablan de los abortos por el estigma asociado con los mismos, observó Joan McCarthy, directora ejecutiva en el Centro de Atención de la Mujer en la Avenida Lake. El centro ha visto un aumento dramático en el número de mujeres latinas con las que trabajan, dijo ella.
"Obviamente, la cultura católica es una fuerte parte de la identidad hispana y el aborto es completamente contrario a las enseñanzas de la iglesia", dijo ella.
"Ahora por la asimilación, lo mismo que ocurrió con la comunidad afroamericana está filtrándose a las comunidades latinas", añadió McCarthy. "Es muy desafortunado, esta desintegración total de la unidad familiar y la falta de reverencia por nuestra fe. No sé si viene de ser parte de la comunidad americana mayor o de una visión del mundo que está corrupta".
Los miembros del grupo Latinos por La Vida (LXV) creen que los valores inherentes de la cultura latina de acoger la vida están siendo oscurecidos por una "cultura de muerte", explicó Daniela Adames, que ayudó a formar el grupo. Latinos por la Vida es una coalición de organizaciones pro vida nacidas del grupo bilingüe de castidad Corazón Puro en el sur de Bronx.
"Creo firmemente que existe una gran necesidad de llegar hasta la población latina y negra ya que son las víctimas principales de este genocidio estratégico que llamamos aborto", dijo Adames en un correo electrónico. "La industria del aborto apunta a la población latina y negra — quizás para ‘poner fin a la pobreza’ — haciendo que el aborto se vea como algo necesario e inofensivo, cuando en realidad nuestras mujeres y familias a menudo quedan vulnerables y guardan silencio. … LXV busca unir a los latinos para elevar nuestras voces y unirnos con otros para hablar en contra de este gran daño a través de la oración, educación y la formación de líderes".
Localmente, Jann Armantrout, coordinadora de asuntos relacionados con la vida para la Diócesis de Rochester, dijo que ella y líderes de las Iglesias en la ciudad, especialmente el Padre Tony Mugavero, tomarán parte en los esfuerzos de la campaña para difundir la palabra y lograr la participación de las comunidades Latinas y afroamericanas.
"Estamos tratando de reconstruir una civilización de amor en nuestro país y en el mundo", dijo ella. "Espero que estemos en la cúspide de una gran conversación aquí facilitada por el esfuerzo ‘¿No soy un niño?’. Si me pregunta, diría que es maravilloso".
Otra parte de la meta de la campaña es lograr que el estado apruebe una "declaración de persona" para un niño en el vientre, dijo el Rev. Walker.
"Es un niño", dijo. "Nos preocupamos por los niños. Por eso tenemos que declarar que es una persona".
La necesidad de tal legislación se remonta a los días cuando los esclavos afroamericanos eran considerados ser tres quintas partes de una persona, dijo el Rev. Walker. Aunque ella tiene inquietudes bioéticas acerca de cualquier declaración de la persona, tal como el debate en curso acerca de cuándo comienza la vida en el vientre, Armantrout dijo que ella apoya la premisa de la declaración de que todas las personas son iguales y creadas a imagen de Dios.
"En la ciudad de Rochester, hogar de Frederick Douglass, nosotros estamos a favor de los no nacidos", declaró el Rev. Walker.